La prevalencia de experiencias alucinatorias y delirantes en la población general, en algunas ocasiones,es relativamente elevada; lo cual refleja el principio de continuidad de la psicopatología; y tales experiencias en población no clínica predicen la propensión a padecer, años más tarde, no solo trastornos del espectro esquizofrénico sino también psicosis afectivas. Por ello, los signos y síntomas positivos se consideran un marcador no específico de trastorno psicológico pues carece de especificad diagnóstica.