Las situaciones que implican una amenaza severa para la persona desencadena diversas reacciones biológicas y psicológicas que pueden dar lugar a distintos problemas, entre lo que destaca, por su gravedad, el trastorno de estrés postraumático. Se trata de un trastorno que produce un alto malestar emocional, es incapacitante, y cuando se desencadena en la infancia, especialmente con las figuras de apego, puede producir una alteración en todo el desarrollo de la persona.