El TDAH se clasifica dentro de los trastornos mentales. Su diagnóstico se basará principalmente en el cumplimiento de uno de los siguientes criterios, ambos reconocidos internacionalmente:
- Criterios del manual CIE-10
- Criterios DSM-IV-TR
Criterios del manual CIE-10
Son los criterios diagnósticos reconocidos y establecidos por la OMS (1992) para diagnosticar un TDAH.
- 6 síntomas de inatención
- 3 de hiperactividad
- 1 de impulsividad
Estos síntomas deben ser persistentes y manifestarse en más de un ambiente de su vida.
Criterios DSM-IV-TR
Los Criterios del Manual Estadístico y de Diagnóstico (DSM-IV-TR) son los más utilizados y han sido establecidos por la Academia Americana de Psiquiatría (2000).
- 6 síntomas de atención
- 6 de hiperactividad/impulsividad
- Síntomas en ambas áreas (seis de cada grupo)
- Los síntomas deben estar presentes antes de los 7 años en al menos dos ambientes de la vida del niño y durar como mínimo seis meses. Por ello, el DSM-IV-TR define un trastorno con tres tipos posibles:
- Hiperactivo/impulsivo
- Inatento
- Combinado
Y además, contempla la posibilidad de que un niño con TDAH de tipo inatento pueda no tener ningún síntoma de hiperactividad/impulsividad.
Según el DSM-IV-TR, todos y cada uno de los siguientes criterios que deben cumplirse para diagnosticar un TDAH :
Criterio A:
- Durante seis meses han persistido seis o más síntomas de desatención, con (1 ó 2) una intensidad incoherente en relación con el nivel de desarrollo del niño.
- Seis o más síntomas de hiperactividad-impulsividad persisten durante 6 meses con una intensidad incoherente en relación con el nivel de desarrollo.
Criterio B: Algunos síntomas de hiperactividad-impulsividad o desatención que causan alteraciones están presentes antes de los 7 años de edad.
Criterio C: Algunas alteraciones provocadas por los síntomas se presentan en dos o más ambientes (por ejemplo, en la escuela y en casa).
Criterio D: Deben existir pruebas claras de un deterioro clínicamente significativo del funcionamiento social, académico o laboral.
Criterio E: Este criterio obliga a descartar otras causas de inatención, como trastornos generalizados del desarrollo, esquizofrenia u otro trastorno psicótico, y trastornos psiquiátricos (del humor, de ansiedad o de la personalidad).