Entre un 10 y un 20% de la población occidental ha sido víctima de algún tipo de abuso sexual durante su infancia. La victimización sexual infantil es un concepto que abarca diferentes conductas sexuales llevadas a cabo bajo coerción, manipulación o uso de la violencia.
Ahora, por primera vez, un estudio realizado por el Grupo de Investigación en Victimización Infantil y Adolescente de la Universitat de Barcelona ha querido cuantificar el problema entrevistando directamente a menores de diferentes colectivos, incluidos aquellos de mayor riesgo, como los que se encuentran en centros de salud mental, del sistema de protección o del sistema de justicia juvenil.
Los resultados, que publica el último número de la revista Gaceta Sanitaria, manifiestan cifras preocupantes de victimización sexual infantil, sobre todo entre menores que se encuentran bajo el amparo de la Administración. Los centros de protección son los que presentan un mayor porcentaje de casos.
Después de entrevistar a 129 adolescentes de entre 12 y 17 años institucionalizados en 18 centros residenciales y de acogida de Cataluña, el 36,4% manifestó haber sufrido algún tipo de abuso sexual a lo largo de su vida –uno de cada cuatro, durante el último año–.
Los abusos sexuales con contacto físico son los más frecuentes entre los adolescentes acogidos en centros de protección. El 6,3% de los chicos y el 36,9% de las chicas –porcentaje cinco veces superior– ha sido en algún momento de su vida víctima sexual con contacto físico por parte de un adulto conocido (16,4%), de un desconocido (4,7%), de un igual (3,9%) o víctima de una violación o intento de violación (14%).
Los abusos sexuales con contacto físico son los más frecuentes entre los adolescentes acogidos en centros de protección
Un 9,4% manifiesta haber sido víctima de exhibicionismo y un 6,2% de acoso sexual verbal, mientras que las solicitudes sexuales a través de internet, teléfono móvil u otro dispositivo electrónico han alcanzado al 19,4% de este colectivo.
Más cifras de la victimización
Las cifras no son más tranquilizadoras en el sistema de justicia juvenil. Según datos de este estudio, la victimización sexual afecta al 35,6% de los jóvenes internados en tres centros cerrados de justicia juvenil y cinco equipos de medio abierto en Cataluña. Existe así una significativa relación entre haber sido víctima de abusos sexuales y la comisión de conductas delictivas.
Por su parte, los menores bajo tratamiento en centros de salud mental son el tercer grupo con más victimización sexual. Un 23,5% de los adolescentes entrevistados en centros de salud mental manifestaron haber sido víctimas a lo largo de su vida, y un 12,1% en el último año, lo que parece indicar una relación entre esta experiencia y el desarrollo de síntomas psicopatológicos.
Por último, la prevalencia más baja, aunque no menos preocupante, de victimización sexual infantil se encuentra en los centros de educación secundaria. Después de entrevistar a 1.105 alumnos/as de siete escuelas catalanas, se constató que el 14,7% había sufrido algún tipo de abuso sexual a lo largo de su vida, siendo el riesgo tres veces superior en chicas.